CRÓNICA: una crónica más y van...pues no sé cuantas, muchas, muchísimas, nunca pensé que estos partidos dieran para tanto, algún día se me acabará la memoria y las ganas de escribir pero aun está lejano ese día, digo yo, ¿o no?. Luis me comentaba ayer que cada semana cuesta más organizar los partidos y es cierto, últimamente ser 10 no es fácil, hasta el jueves no logro confirmar los partidos y encima nos estamos llevando la sorpresa de "confirmados" que se retiran a última o penúltima hora. En fin, seguiremos hasta que podamos, por nosotros que no quede, hagámoslo "por los niños" que también disfrutan de estos sábados. Vamos al partido. El título de la crónica se corresponde con la foto del Google Earth que tenéis debajo:
Sí, esto es BW, nuestro campo habitual, algo descolorido en la foto satélite. El otro día leí "Esto es Anduva", el campo del Mirandés, supongo que remedando "This is Anfield", el campo del Liverpool. Pues bien, con frío y viento, el otro día nos presentamos 11 en BW y, haciendo honor al título, dimos lo que siempre damos en nuestro campo, ganas y voluntad de hacerlo bien, disfrutando de nuestro partido. Evidentemente nadie podía quedarse en la banda para hacer cambios (los pingüinos le hubieran mordisqueado los pies), así que 6 blancos contra 5 coloreados, con la intención de cambiar algún jugador para la segunda parte en caso de mucho desequilibrio. No hizo falta como veremos.
A los 25" Eduardo, tras rebotar el balón en JM Fdez, marcó el primer gol blanco pasando entre mis piernas. 1-0 para los blancos. Yo no daba crédito, debía ser la cantidad de ropa que llevaba (gorro, guantes, forro polar, camiseta de manga larga, camiseta de manga corta, camiseta imperio, pantalón de chandal, calzonas) que me impidió tener más agilidad en esa jugada, la verdad es que tenía toda la pinta de papá pitufo e iba más preparado para subir a un 3000 que para agacharme a detener una pelota. A los 10 minutos me tuve que quitar toda esa ropa porque era incómodo, aparte de que al sol la temperatura no era tan gélida. Los coloreados nos repusimos y empatamos a 1, no recuerdo quién (JM Fdez y Jose Jaime se repartieron la mayor parte de los goles en este partido). A partir de aquí se sucedieron varios empates (2-2, 3-3, uno de ellos autogol de Álvaro con Eduardo de portero), con un juego rápido por ambas partes pero con muchos fallos ante los porteros, sobre todo el equipo blanco, que inexplicablemente tiraba mucho fuera. Ya lo hemos contado otras veces; cuando un equipo juega con uno más parece que se confía, que los goles llegarán por esa superioridad numérica y sólo hace falta esperar, sin forzar las cosas y "perdonando" en cierto modo al contrario que juega con uno menos en su equipo. Caballerosidad y honorabilidad. Pues bien, creo que en este partido pasó algo parecido, no forzar la máquina desde el principio puede pasar factura, confiarse es suicida cuando delante hay un equipo que, consciente de su menor número, rinde mucho más y corre por el que "falta". Un gol de Jose Jaime, otro mío y otro de Javi dibujaron el marcador al final de la 1ª parte, 5-4 para los coloreados tras 60' de lucha, esfuerzo y buen juego.
- Segunda parte, 36' por delante. Los coloreados nos temimos que iba a ser larga, muy larga, y lo fue, ya lo creo. Rechazamos el ofrecimiento de que se sumara un jugador blanco a nuestras filas, total, si íbamos ganando, con orden y buena colocación, ya sabíamos cómo teníamos que jugarle al equipo blanco. Pues bien, nada más comenzar los blancos empataron rápidamente, 5-5; creo que Javi comentó que "con viento a favor y uno más, lo pasaríamos mal", refiriéndose al equipo coloreado. Así fue, lo pasamos mal pero los blancos tenían el punto de mira totalmente desviado; no he visto un equipo con más oportunidades fallar tantas. Ya fuera solos ante el portero, con pases de la muerte, con cabezazos (como siempre uno de Javi al larguero), con paredes, con jugadas, el caso es que no metían ni un gol. Particularmente saqué dos pelotas que entraban sin portero, la última a mi compañero Áticus que, solo ante mí, falló en plan Cardeñosa (Mundial 78 ante Brasil, lo digo por los más jóvenes). En esas estábamos, sufriendo como un cochino en San Martín, cuando el que esto escribe cogió la pelota por la banda, regateé como pude a Luis y, persiguiéndome este último, casi sin ángulo, logré conectar un zurdazo que Álvaro paró en primera instancia con una mano pero no desvió lo suficiente la pelota y ésta entró mansamente en la portería blanqueada. Alegría para mí y mi equipo, 6-5 tras casi media hora de segunda parte. Sin embargo, como se dice vulgarmente, "la alegría va por barrios". Eduardo estalló. Primero, con el apoyo de Antonio, decía que la pelota había salido fuera cuando regateé a Luis, con lo cual evidentemente yo no estaba de acuerdo (de ser así yo no hubiera seguido la jugada, si era casi en el centro del campo cuando se suponía que la pelota había salido) y Luis, el regateado, no confirmaba tampoco que hubiera salido. Luego continuó con una jugada de la primera parte que había acabado en gol blanco pero que se anuló por falta previa a JM Fdez, diciendo que ni había habido falta ni "ná de ná". En fin, está bien que alguien se indigne porque no le guste ir perdiendo (eso demuestra sangre en las venas) aunque no comparto el fondo de las protestas. El motivo principal por el que los blancos perdían era la cantidad de fallos que estaban cometiendo ante nuestra portería y de eso los coloreados no teníamos culpa, salvo el hecho de que nos defendíamos ordenadamente y que teníamos algo de suerte (magnífico partido en defensa de Albert y Pepedu, dos clásicos en estas lides). En fin, con el 6-5 los blancos intentaron con ahínco empatar pero ocurrió lo contrario, dos goles coloreados más pusieron un 8-5 inalcanzable que Álvaro, casi terminando y tras estrepitoso fallo defensivo coloreado, redujo hasta el 8-6 definitivo.
INCIDENCIAS: cielo totalmente despejado con frío siberiano (0º señalaba el termómetro del Palacio de Congresos sobre las 9:30 horas) aunque lo peor fue el viento que se levantó sobre las 11 y que arrastraba tierra aumentando la sensación de frío; no obstante, particularmente esperaba aun más frío si echamos cuenta de los medios de comunicación. A los niños (Reyes, Ariadna, Adam, Javier y Jose Manuel) los dejamos en el pabellón cubierto y allí anduvieron un buen rato, al menos se libraban del viento; luego se sumaron las mellizas y el pequeño de Jose Jaime. Cerveza tranquila y fría en Viña, éramos los únicos que permanecíamos sentados al aire libre en toda la explanada pero la verdad es que se aguantaba bien. En fin, lo normal en invierno aunque en nuestra historia de partidos predomine más el calor que el frío.
EQUIPO BLANCO: Eduardo, Álvaro, Luis, Javi, Antonio Morales y Áticus.
EQUIPO COLOR: Albert, Pepedu, Jose Jaime, JM Fernández y yo mismo (JM-2).
CÓMPUTO TEMPORADA 2011-2012: 6 victorias blancas, 6 victorias color, 3 empates, 2 partidos especiales.
Jose Manuel
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