|
"Este partido no caerá en el olvido ni los héroes que lucharon en él" |
FOTOS: enlace en la página superior derecha (FOTOS CELEBRACIÓN 30 AÑOS)
RESULTADO: 2-2 (partido especial a efectos clasificatorios)
CRÓNICA DE UN ENCUENTRO GLORIOSO: a la guerra de Troya (no hagáis rimas), me he tenido que remontar a una frase de reminiscencias homéricas para poder encontrar una calificación a 22 auténticos futboleros pata negra total protagonistas de un partido de alto voltaje (bueno, alguna descarga eléctrica no le hubiera venido mal a alguno para perder óxido). Aun así Homero no es suficiente para transcribir las casi inenarrables vivencias del sábado uno de diciembre; por cierto, espero hacerlo bien y que seáis generosos con vuestras críticas y también con vuestras aportaciones (que las espero, ¡eh!, esta vez tenéis, mejor dicho, debéis aportar algo a esta crónica).
¿ORGANIZACIÓN?
Más de un mes estuvimos preparando este encuentro desde que Javi lanzó la idea y nos constituimos él y yo mismo en el Comité Organizador de Los 30 Años. Decidimos una primera fecha (17 de noviembre) que posteriormente Maldonado y compañía nos aguaron con un pronóstico erróneo (donde se pongan Mariano Medina y las cabañuelas...que se quiten estos advenedizos de los satélites). También hablamos de lanzar unas camisetas conmemorativas, con el concurso de ideas que todos conocéis y que dio como resultado el dibujo de arriba. Nos quedó un diseño retro total, con ese naranjito litronero, esos curros imposibles pateando un balón, el euro simbolizando lo que pagamos por jugar y las Copas del Mundo y de Europa. Para llegar a ese dibujo final contamos con la inestimable colaboración de Jucho, mi hijo Jose Manuel y Delfina. En cuanto a las camisetas, ya lo sé, os faltan a muchos; aun siguen en producción, ya que el éxito obtenido ha sido tal que agotamos el stock con el que contaban. Pude repartir 24 camisetas el día del partido, faltando aun 21 por distribuir (espero cumplir durante este mes de diciembre, no digo el año). Por cierto, si alguien quiere alguna más sigue a tiempo de encargarla.
En cuanto a lo demás, pues ya lo sabéis: confirmaciones de quién venía, reserva de la Viña, búsqueda del campo, aplazamiento para el día 1 de diciembre y, sobre todo, las ganas de pasarlo bien y disfrutar de ese día en muy pero que muy buena compañía. Hubo gestiones para alquilar el Charco de la Pava por parte de Juanky pero era difícil (nos ofrecían un campo de albero y pensando en Eduardo dijimos que no). Nos quedaba la opción del Club Militar Hispalis (conocido entre los habituales como el "clú") y allá que me dio por llamar por teléfono unos días antes para enterarme bien de cómo reservar el campo de hierba. Tras hablar con dos personas y ninguna aclararme nada, hablo con un tercer personaje. El trato fue de Vd. Resumiendo la conversación,
"Mire, llamo para enterarme de cómo reservar el campo de hierba de fútbol", "Pues ahora le pregunto a un compañero, yo no lo sé, llame otra vez dentro de diez minutos" me responde con acento hispanoamericano.
"Vale, ¿cuál es su nombre para preguntar directamente por Vd?" ,
"Ah, sí, yo me llamo Darwin, como Charles Darwin". "Sí, sí, lo conozco (evidentemente yo me refería al biólogo evolucionista)".
"Ah, sí, pues su voz me suena, yo también lo conozco a Vd. (lisensiado le faltó decirme)
" me contesta el bueno del
manito Darwin, al que ni conozco ni ná de ná. Las cosas del Vd...En fin, conclusión, el cuarto portero con el que hablé ya me lo aclaró, el campo era "maricón el último" (perdón si no es políticamente correcto pero entre machos entendemos lo que quiero decir), estaba libre para quien lo cogiera, por eso insistí en la puntualidad prusiana para ese día. El jueves 29 de noviembre fui expresamente a ver el campo, estuve midiendo el ancho, comprobando las redes y constatando que la hierba estaba un poco alta y el piso algo irregular, pero el apaño nos lo iba a hacer dada la gran afluencia de jugadores que se preveía.
|
EQUIPO BLANCO AL COMPLETO |
Viernes
por la noche y llueve sobre Sevilla, ¡dita sea! “Verás tú mañana
el campo, entre la altura de la hierba, lo que crezca esta noche y
los charcos, se van a acordar de mí y mi parentela” pienso
inmediatamente. “Y encima hace un frío pingüinero, con esas piernecitas al aire, de
la pulmonía no nos libra nadie” añado mentalmente. “Hala, mejor
a dormir que mañana ya veremos y que pase lo que sea”, sonreí y desaparecí en las
brumas nocturnas del sueño que me invadía.
EL REENCUENTRO
|
EQUIPO COLOR EXCEPTO ROBERTO Y LUIS (más Adam) |
Sábado,
uno de diciembre de 2012. Efectivamente, frío de nevera pero con un
sol radiante que auguraba un buen día. Desayuno completo (preveía
que iba a necesitar mucha energía) y ¡en marcha!, con mi hijo Jose
Manuel de fiel escudero, los dos camino del Clú Militar cargados
como mulas (bolsa de deporte, cuatro balones, dos bolsas con
camisetas) para recibir a una peculiar élite de jugadores retirados,
veteranos, en activo y algún chavalote de los 80. Allá que nos
encajamos a las 9:30 horas, coincidiendo con el primer jugador, Jose
Luis y señora. Charlamos un rato y, cuando vemos llegar a un grupo
de gente desconocida, los dos coincidimos en que mejor que se fuera
al campo a pillarlo, que no nos podíamos fiar de nadie, ni siquiera
de Darwin, que igual es creacionista y se había inventado con el otro portero que nadie suele jugar los sábados allí. Y en la puerta me quedé,
recibiéndoos como bien sabéis, algo tenso porque quería que
saliera todo bien. Llamada de Manolo, “tengo la pierna abierta”,
creo que me dijo, pensé que mejor una que no las dos, “no puedo
jugar, a la cerveza sííííí”. Guasap de Dani Gómez, “estoy
griposo perdido”, bueno, dos menos. “Que Fiden no viene”, me
anuncia Pepedu. Aquello parecía la Guerra de los Treinta Años con
tanta baja de última hora (y aun no habíamos empezado). En éstas aparece Fran Patricio, lo cual
me alegró sobremanera por el esfuerzo que sé que le suponía ir;
con JM Fdez aquello equilibraba las bajas. También apareció Jesús,
el hermano de Pepedu, jugador de los ochenta al que hacía mucho
tiempo no veía y, aunque no venía a jugar este partido, me alegró
verle por allí. Cuando eran las 10:10 horas saqué mi lista y uno
tras otro fui comprobando, ufff, somos 21, ¡¡¡falta mi hermano
Luis!!! Llamada y, en vista de que no me cogía el teléfono, supuse
que vendría en camino, como así fue (comprendí que arrastrar 3
niños más madre fotógrafa era complicado para ser puntual pese a
lo extraordinario del día). La puntualidad de todos fue llamativa, eso confirma mis sospechas; cuando queréis estar a tiempo lo conseguís, no como otros sábados que yo me sé...
Cuando
llegué al campo de fútbol, la imagen era asombrosa. Ver tanto amigo
en aquel campo, con algunas señoras (mérito tiene lo de Mercedes,
Yolanda y mi cuñada Isabel con la pelona que hacía) y niños
significaba que la convocatoria había tenido éxito. Aquello
presagiaba una buena mañana futbolera y un mejor postpartido. Las
cámaras de fotos empezaron a echar humo (lástima que Luis se
perdiera las primeras por su tardanza). Los blancos, todos
uniformaditos, parecían colegiales desbocados de un colegio de curas que hubieran visto UNA CHICA por primera vez, correteando arriba y abajo, cuchicheando para
organizarse futbolísticamente (ahora que lo pienso, igual les ha pasado). Los coloreados, más sobrios, cada
uno de un color (¿de dónde había sacado Juan esa camiseta?)
empezamos a calentar lo que pudimos, más bien nada, porque con tanta
distracción era difícil. ¿Fútbol 11, fútbol 7 con cambios o
fútbol 7 con 11 tíos por equipo? La 3ª opción era la lógica, con
el frío no tenía sentido que nadie se quedara fuera y para correr
en un campo de fútbol 11 tampoco estamos, no se trataba de
finiquitar a nadie.
¿EL PARTIDO?
Y empezó el partido, 45 minutos cada parte. Con la noche de lluvia previa, el campo de juego estaba húmedo, resbaladizo y nuestras zapatillas no estaban preparadas (por no hablar de nuestros cuerpos...). Aquello era todo un espectáculo; desde fuera nos veían a todos concentrados en la zona central del campo, nada de bandas, intentando controlar un balón que botaba más de la cuenta y que con las irregularidades del terreno hacía extraños. Eduardo fue a lo suyo, se propuso arreglar las irregularidades del campo con su cuerpo serrano, rodando sobre la hierba con su clásica rodilla ensangrentada, como si aquello fuera una pista americana. No lo logró pero nos dejó imágenes impactantes. Por no hablar de Jucho, como entraba el condenado, tirándose al suelo para rebañar la pelota, "no pasarán" era su lema cual rojerío internacional. Aparte de estos detalles, me quedo con el ansia por coger la pelota (cuando somos 22 se toca mucho menos) y no soltarla hasta que no hubiera más remedio. Era difícil combinar, hacer jugadas largas, predominaba el pelotazo p'arriba y a seguirlo, en plan rugby. A pesar de la concentración de jugadores comenzamos a hilvanar algunas jugadas y la portería blanca fue objeto del deseo coloreado, con algunos disparos que se fueron por poco o bien fueron detenidos por el portero blanco de turno. Emilio Márquez y Rafa se hicieron fuertes en defensa (no han olvidado el oficio) y acompañados del resto del equipo blanco no se dejaron amedrentar. Así estábamos cuando Álvaro, haciendo honor a su olfato goleador, cazó en el centro del área (no me digáis que no le echo imaginación a las rayas del campo) un pase lateral y batió a nuestro portero Roberto, 1-0 para los blancos. No era un gol fácil de marcar pero ahí estaba, los blancos arriba y los coloreados abajo (no es literal, que os conozco). Quedaba tiempo por delante y los coloreados nos lanzamos a por el empate, como no podía ser de otro modo. Empezamos a usar las bandas, sorteando blancos y la hierba típica de la sabana de algunas partes del campo; no era tarea fácil, Dani Gaume lo tuvo en una jugada pero salió fuera para enfado de Roberto (¡¡¡no falles eso!!!). El caso es que JM Fdez apareció por una banda y, dando un buen pase a Javi, éste marcó empujando suavemente la pelota dentro. 1-1, empate, alegría, jolgorio, todo volvía a empezar.
Y apareció Emilio Lora para no dejarnos disfrutar. Enganchó un buen disparo desde casi fuera del área imaginaria (yo creo que nunca ha habido rayas en este campo) y batió a nuestro portero, que no recuerdo quien era. 2-1 para los blancos y la primera parte que se acababa. Eso sí, Carlos inauguraba la nómina de lesionados ilustres, los damnificados de los 30 tacos. Luego se sumaron Jose G., Kike y Álvaro, aunque éste (el "juvenil" del partido) aguantó hasta el final.
La 2ª parte comenzó con el "préstamo" de Jose Luis a los capitidisminuidos blancos, dada su ristra de lesionados. Ahora que lo pienso no fue un buen partido, entre el campo, que éramos muchos y que el balón botaba lo suyo resultaba laborioso trenzar jugadas y darle vistosidad al juego. Los coloreados teníamos la obligación de intentar empatar, NO PODÍAMOS PERDER EL PARTIDO DEL SIGLO, éste precisamente no. Lo intentábamos pero no lo conseguíamos, incluso algún contraataque blanco nos puso en peligro. Eduardo cada dos por tres me decía que no parara el reloj en las interrupciones, que esto era un partido de 45 minutos. Acogotado me dejaba, mi fama con el crono me persigue. El recogepelotas contratado por los blancos retrasaba aun más el partido, no sé que instrucciones le dieron pero el chaval se lo tomaba con calma chicha. Hasta que un saque de esquina se transformó en el gol más espectacular del partido. Saque de esquina, algo pasado, y Dani Gaume que la caza al vuelo, algo escorado, y con el empeine larga un derechazo tremendo que se cuela por la escuadra de la portería blanqueada, 2-2. Alegría coloreada y perspectiva de poder lograr la victoria. Pero no, no fue así. Los blancos aguantaron bien, incluso en los últimos minutos eran uno menos y Jose Luis se acercó peligrosamente con un disparo que se fue por poco delante de la portería coloreada. Sí recuerdo que jugamos por banda y que hubo centros al área blanca, alguno Luis lo remató de cabeza pero sin lograr el gol. Así transcurría la segunda parte hasta que Eduardo, el inquisidor, venga a preguntarme el tiempo, miré el reloj y pasaban un par de minutos de los 45, así que mejor terminar y todos contentos (bueno, los lesionados no tanto, aquí no había jacuzzi ni masajistas ni, bueno, ningún extra para compensar el esfuerzo veterano).
EL POSTPARTIDO (MÁS LARGO QUE EL PARTIDO, PUES CLARO)
De
la Viña, ufff, como resumirlo. Muchas conversaciones cruzadas, mucha
risas, cerveza a raudales, comida no tanta aunque nos hizo el apaño. No
sé cómo acabó, a las 19:00 horas me fui.
Buen
día, mejor compañía, ¿para cuando la siguiente celebración? ¿el partido
de los 35 o de los 40? Alguno vamos a llegar con muletas, si
llegamos...ya lo hablaremos. No quiero terminar sin recordar a aquellos que no pudieron acompañarnos en este día por razones varias, a aquellos que han disfrutado con nosotros en alguno de los campos en los que hemos jugado y, sobre todo, a aquellos que desgraciadamente ya no pueden acompañarnos ni en este día ni en otros venideros, va por ellos también.
Señores, señoras, todo un placer haber disfrutado este día con todos vosotros/as.
INCIDENCIAS/OTROS DATOS: más espectadores que de costumbre, entre ellos Jesús (hermano de Pepedu), también antiguo jugador, aunque esta vez no quiso vestirse de corto. Fotógrafas oficiales: Mercedes e Isabel. Lesiones a punta pala: primero Carlos, luego Jose G., más tarde Quique, también Álvaro y seguro que alguno más. Esperemos que en poco tiempo todo el mundo esté plenamente recuperado. Reparto de las camisetas que teníamos, espero que a todos os estén bien;
si no, ya sabéis, adelgazad o engordad, según el caso...
|
LOS AUTÉNTICOS VETERANOS ORIGINALES DEL AÑO 1982 |
JUGADORES BLANCOS (11): Emilio Márquez, Emilio Lora, Carlos, Fran Patricio, Quique, Fernando, Álvaro, Eduardo, Juanky, Jose Galdón y Rafa. Tras las múltiples lesiones, Jose Luis se sumó a este equipo en la 2ª parte.
JUGADORES COLOR (11): Javi, Luis, Jose Luis, Jucho, Roberto, Pepedu, Albert, JM Fdez, Dani Gaume, Juan Martí y yo mismo (JM).
FOTOS: enlace en la página superior derecha (FOTOS CELEBRACIÓN 30 AÑOS)