RESULTADO: 10-8 (VICTORIA COLOR)
CRÓNICA: un nuevo reto dominical, plasmar en unas cuantas líneas lo sucedido en nuestro querido campo blancowhitiano. Cada vez es más difícil aunque es cierto que ningún día ni ningún partido se parece a otro, siempre hay algo que los hace diferentes. El pasado sábado, los que llegamos a las 10 (ya podéis imaginar que éramos los menos) nos encontramos con la sorpresa de 7 chavales "invadiendo" nuestra querida pista; a las 10:10 resonó la voz de Eduardo recordándoles que se les había acabado su tiempo, era nuestro momento para empezar a mostrar nuestras enormes cualidades futbolísticas. Empezamos 6 contra 5, Manolo, dadas sus noches de viernes, llegó más que tardecillo, con un "buenas tardes" lo tuvimos que recibir... el caso es que, a los 5 minutos, el que esto escribe recibió un balonazo en toda la cara que me trastocó hasta el cerebelo, de verdad que estuve unos 10 minutos deambulando por el campo y viendo estrellitas, chispas y a los jugadores como en neblina, atontado del todo. Todo se me quitó cuando, tras un regate y buen disparo, me tocó inaugurar el marcador a favor de los coloreados, 1-0. Javi, como no, de cabeza, cayendo tras un pase por alto, marcó el empate a uno. Pasan los años y sigue sin haber modo de parar a mi hermano en la suerte del cabeceo, todos sabemos que está ahí, que le va a dar, que es un peligro constante, pero nada, no hay quien lo detenga. A partir de ahí el partido se convirtió en un auténtico carrusel de oportunidades, con alternativas constantes en el marcador, unas veces los coloreados arriba y otras los blancos, era un partido disputadísimo, nada que ver con los anteriores de claro dominio coloreado. Me quedo, si me lo permitís, con un gol que conseguí tras un fuerte disparo lejano, balón que choca en el larguero, rebota en el suelo, choca otra vez con el larguero y para adentro, todo eso mientras Luis lo miraba incrédulo. Como le dije, "ya tengo para unos cuantos meses...". Pero hubo más goles, muchos de ellos bonitos, el ritmo trepidante del partido, la lluvia que caía a ratos, todo ello nos hacía disfrutar de momentos de gloria, de éxtasis futbolística, nuestro amor por este juego se acrecentaba minuto a minuto. Hasta Andy consiguió otra vez un doblete, pero esta vez ambos goles fueron con el pie y con muy poco ángulo. Como le dije posteriormente, "estás aprendiendo de los mejores", nos estás viendo jugar y con lo que aprendes sobre colocación, forma de darle, de defender, de pasar el balón, te convertirás en un buen futbolista, a este ritmo nos jubilarás a los demás.
Llegado el descanso íbamos 7-6 para los coloreados. Tras un breve parón, continuamos y otra vez Javi, en un gol casi calcado del anterior de cabeza, nos volvió a batir. Y otro gol blanco nos dejaba en un 8-7 perdiendo. Uffff, qué difícil parecía remontar un partido así, una tarea de titanes. El caso es que empatamos nuevamente, menos mal. 8-8. Y aquí sobrevino la clave del partido y creo también que la explicación de la derrota blanca, méritos coloreados aparte. Jugábamos al límite, empatados, 10 minutos quedaban para el final y Luis, entrando para quitarle el balón a Manolo, pisa la pelota y la pierna de apoyo se le gira, torciéndose de modo doloroso el tobillo. Grito de dolor, Luis al suelo y, tras unos minutos, puede levantarse y caminar pero apoyando levemente el pie, cuyo tobillo se va hinchando progresivamente. Había caído un baluarte defensivo blanco, un valladar, un monolito ante el que los demás alzamos la mirada para ver cómo podemos superarlo y pocas veces lo logramos. Esa baja trastocó la defensa blanca; Pepedu, amablemente y en gesto que le honra, salió por el equipo coloreado, quedábamos 5 contra 5 para que el partido siguiera igualado. Pero no fue así, los coloreados aprovechamos un par de oportunidades y en un minuto logramos llegar al 10-8 definitivo, tras un par de jugadas muy rápidas que aprovecharon los mayores huecos defensivos blancos. Alguna oportunidad tuvieron los blancos pero ya no lograron volver a marcar. Otra vez será. De todos modos, no fue una victoria muy celebrada, sobre todo por el daño de Luis y que el partido cambió radicalmente tras esa baja. No me cabe duda que nos quedan más partidos igualados como éste en el futuro.
INCIDENCIAS: Día gris, con chirimiri incluido, una mañana preinvernal, de esas que invitan a quedarse en la cama pero que para nosotros no significa nada, nos ponemos nuestras camisetas, calzonas y zapatillas y para adelante, a enfrentarnos con nuestros compañeros y amigos en un partidillo más de esta larga tradición futbolera. Esta vez solo había los niños que acompañan a Fran más Ariadna, todos se enfrentaron a un tiempo desapacible. Me preocupa que Carrasquilla y cía. no aparecieran, espero que ninguno haya caído como consecuencia de las heridas recibidas en la toma de Constantinopla. Cervecilla en Viña a cubierto; por cierto, a raíz de la conversación que mantuvimos, debemos hacer la lista de lugares "dignos" para comer en Sevilla o alrededores.
JUGADORES COLOREADOS: Manolo Lora, Albert, Dani Gaume, Jose Jaime, Pepedu y yo mismo (JM-3).
JUGADORES BLANCOS: Javi, Luis, Eduardo, Fran Patricio, Joaquín "Guti" y Andy.
CÓMPUTO TEMPORADA 2010-2011: 6 VICTORIAS COLOREADAS, un empate, 2 VICTORIAS BLANCAS.
Jose Manuel.
CRÓNICA: un nuevo reto dominical, plasmar en unas cuantas líneas lo sucedido en nuestro querido campo blancowhitiano. Cada vez es más difícil aunque es cierto que ningún día ni ningún partido se parece a otro, siempre hay algo que los hace diferentes. El pasado sábado, los que llegamos a las 10 (ya podéis imaginar que éramos los menos) nos encontramos con la sorpresa de 7 chavales "invadiendo" nuestra querida pista; a las 10:10 resonó la voz de Eduardo recordándoles que se les había acabado su tiempo, era nuestro momento para empezar a mostrar nuestras enormes cualidades futbolísticas. Empezamos 6 contra 5, Manolo, dadas sus noches de viernes, llegó más que tardecillo, con un "buenas tardes" lo tuvimos que recibir... el caso es que, a los 5 minutos, el que esto escribe recibió un balonazo en toda la cara que me trastocó hasta el cerebelo, de verdad que estuve unos 10 minutos deambulando por el campo y viendo estrellitas, chispas y a los jugadores como en neblina, atontado del todo. Todo se me quitó cuando, tras un regate y buen disparo, me tocó inaugurar el marcador a favor de los coloreados, 1-0. Javi, como no, de cabeza, cayendo tras un pase por alto, marcó el empate a uno. Pasan los años y sigue sin haber modo de parar a mi hermano en la suerte del cabeceo, todos sabemos que está ahí, que le va a dar, que es un peligro constante, pero nada, no hay quien lo detenga. A partir de ahí el partido se convirtió en un auténtico carrusel de oportunidades, con alternativas constantes en el marcador, unas veces los coloreados arriba y otras los blancos, era un partido disputadísimo, nada que ver con los anteriores de claro dominio coloreado. Me quedo, si me lo permitís, con un gol que conseguí tras un fuerte disparo lejano, balón que choca en el larguero, rebota en el suelo, choca otra vez con el larguero y para adentro, todo eso mientras Luis lo miraba incrédulo. Como le dije, "ya tengo para unos cuantos meses...". Pero hubo más goles, muchos de ellos bonitos, el ritmo trepidante del partido, la lluvia que caía a ratos, todo ello nos hacía disfrutar de momentos de gloria, de éxtasis futbolística, nuestro amor por este juego se acrecentaba minuto a minuto. Hasta Andy consiguió otra vez un doblete, pero esta vez ambos goles fueron con el pie y con muy poco ángulo. Como le dije posteriormente, "estás aprendiendo de los mejores", nos estás viendo jugar y con lo que aprendes sobre colocación, forma de darle, de defender, de pasar el balón, te convertirás en un buen futbolista, a este ritmo nos jubilarás a los demás.
Llegado el descanso íbamos 7-6 para los coloreados. Tras un breve parón, continuamos y otra vez Javi, en un gol casi calcado del anterior de cabeza, nos volvió a batir. Y otro gol blanco nos dejaba en un 8-7 perdiendo. Uffff, qué difícil parecía remontar un partido así, una tarea de titanes. El caso es que empatamos nuevamente, menos mal. 8-8. Y aquí sobrevino la clave del partido y creo también que la explicación de la derrota blanca, méritos coloreados aparte. Jugábamos al límite, empatados, 10 minutos quedaban para el final y Luis, entrando para quitarle el balón a Manolo, pisa la pelota y la pierna de apoyo se le gira, torciéndose de modo doloroso el tobillo. Grito de dolor, Luis al suelo y, tras unos minutos, puede levantarse y caminar pero apoyando levemente el pie, cuyo tobillo se va hinchando progresivamente. Había caído un baluarte defensivo blanco, un valladar, un monolito ante el que los demás alzamos la mirada para ver cómo podemos superarlo y pocas veces lo logramos. Esa baja trastocó la defensa blanca; Pepedu, amablemente y en gesto que le honra, salió por el equipo coloreado, quedábamos 5 contra 5 para que el partido siguiera igualado. Pero no fue así, los coloreados aprovechamos un par de oportunidades y en un minuto logramos llegar al 10-8 definitivo, tras un par de jugadas muy rápidas que aprovecharon los mayores huecos defensivos blancos. Alguna oportunidad tuvieron los blancos pero ya no lograron volver a marcar. Otra vez será. De todos modos, no fue una victoria muy celebrada, sobre todo por el daño de Luis y que el partido cambió radicalmente tras esa baja. No me cabe duda que nos quedan más partidos igualados como éste en el futuro.
INCIDENCIAS: Día gris, con chirimiri incluido, una mañana preinvernal, de esas que invitan a quedarse en la cama pero que para nosotros no significa nada, nos ponemos nuestras camisetas, calzonas y zapatillas y para adelante, a enfrentarnos con nuestros compañeros y amigos en un partidillo más de esta larga tradición futbolera. Esta vez solo había los niños que acompañan a Fran más Ariadna, todos se enfrentaron a un tiempo desapacible. Me preocupa que Carrasquilla y cía. no aparecieran, espero que ninguno haya caído como consecuencia de las heridas recibidas en la toma de Constantinopla. Cervecilla en Viña a cubierto; por cierto, a raíz de la conversación que mantuvimos, debemos hacer la lista de lugares "dignos" para comer en Sevilla o alrededores.
JUGADORES COLOREADOS: Manolo Lora, Albert, Dani Gaume, Jose Jaime, Pepedu y yo mismo (JM-3).
JUGADORES BLANCOS: Javi, Luis, Eduardo, Fran Patricio, Joaquín "Guti" y Andy.
CÓMPUTO TEMPORADA 2010-2011: 6 VICTORIAS COLOREADAS, un empate, 2 VICTORIAS BLANCAS.
Jose Manuel.
1 comentario:
Hola a todos, os mando la crónica del pasado sábado. En cuanto a mi hermano Luis, finalmente está escayolado con una férula, tiene fisura de un hueso de los que conecta el tobillo con el resto de la pierna, 14 días de reposo y de no apoyar el pie, luego ya se verá. Como veis, cuando hablo de auténticos héroes que lo dan todo por su equipo no es un uso hiperbólico del lenguaje precisamente; desgraciadamente en este caso pues le cuesta estar en casa sin poder trabajar ni sabiendo cuando podrá volver a jugar si le quedan aun ganas. En fin, cosas que pasan y que nos pasan a los que jugamos.
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